Re: Good Bye Emily {Libre}

por **Emily Greyback** Sáb Jul 03, 2010 1:30 am

Yo había jugado y pensando con desbordante inteligencia todo, había recibido su hechizo aunque luego me arrepintiese de aquello. Sentí un dolor en mi cabeza tan intenso que me hacía perder el objetivo que tenía, justo había caído sobre un firme mármol en vez del césped que se encontraba y extendía por todo su alrededor. ¡Vaya suerte la mía! Pasé mi mano por mi cabeza con disimulo como si con ello pudiese desaparecer lo que sentía, solo faltaría que hubiese sangre para que la escena se encontrase cada vez en mi contra. Por suerte no, no encontré aquel líquido carmín oscuro con olor a oxido que me hacía sentir nauseas.

Como era de esperarse mi escuálido hechizo no impacto en su cuerpo, si no que fue derrotado por un simple protego, me encogí de hombros ante aquello ya que no esperaba nada menos. - ¿No harás nada más Dylan? ¿Qué sucede, se te acabaron las palabras? – Dije con voz desafiante manteniendo siempre mi varita en la distancia que nos separaba, acortaba el espacio que se interponía entre mi cuerpo y el suyo caminando con paso decidido y altivo- Cierto! – Exclamé mirándolo de forma comprensiva como si entendiese lo que ocurría- El malo de Jason no te deja salir a la luz, pues ven, demuéstrale que tu eres mejor… - Mis pies se clavaron al suelo como si hubiese lanzado un ancla al fondo del profundo mar y sonreí, le sonreí de forma inocente como si no supiese lo que podría pasar. Aunque a decir verdad no sabía hasta donde iba a llegar, había perdido mis cabales y el centro de mi cordura. Lo peor de mi había salido a flote y se reflejaba en cada una de mis palabras, cada uno de mis movimientos, en la intención de todos mi actos como si un aura oscura me hubiese envuelto.

Mi mirada se clavó en la suya con agresividad, mientras luchaba por no pronunciar aquellas palabras que luchaban con furia por ser emitidas, por ser resonadas por la inmensidad del lugar. Apreté la varita con más fuerza como si mis intenciones fueran romperla en dos y si seguí así lo lograría, mas no importaba aquello en esos momentos. Lo importante era el individuo que se encontraba a escasa distancia de mi, luchando consigo mismo para no actuar sin pensar con anterioridad.

por **Jason Fox** Sáb Jul 03, 2010 7:53 pm

Cuando sus palabra llegaron a mis oídos una fuerte y extraña sensación me arrebato por completo, ahora entendía que buscaba Emily, quería liberar mi otro yo, ese que opacaba fingiendo ser un chico amable, divertido, sociable, cariñoso y demasiado sentimental. Y aun que estuviera haciendo lo posible por no convertirme en aquello que siempre había sido, en controlar mis ansias y mi enojo, pero aquello fue lo ultimo que soporte, la gota que renvalsaba el vaso, el grano de arena que lo hacia irrelevante. Cerré mis ojos intentando evitar aquello pero aun así mi verdadera personalidad había salido a flote, aquel arrogante, egocéntrico, orgulloso, malvado y poco confiable joven. Me odiaba a mi mismo por permitirlo pero odiaba aun mas a ella por no haberse detenido en cuanto me vio de aquella manera, mis ojos se abrieron lentamente y ese habitual brillo y esa común sonrisa habían desaparecido. No era más que una sombra debajo de mí.
Nada podía ponerse peor, y aun que aun quería a Emily aquel sentimiento nuevo para con ella lo estaba opacando todo, como si hubiera perdido la cabeza. Mi mirada se agudizo clavándose directamente en sus ojos y como si se tratara de un simple reflejo mi brazo se extendió por completo esta vez con mas firmeza que antes y ahora me comenzaba a dar cuenta de las cosa. Emily siempre había querido esto, y lo había conseguido, había conseguido obtener al verdadero Jason, al que no tiene temores, al que todo le importa poco, al que nunca pensaría en consecuencias, al que reflejara su propia postura.
Un suspiro ligero y elocuente salio de mis finos labios, y mi ceño se frunció identificando a Emily nuevamente -las palabras es posible, los hechizos no- dije de manera prepotente, con demasiado orgullo y enojo a la vez -pero parece que estas obteniendo lo que tanto querías... bien como gustes...- dije asintiendo con la cabeza -conóceme en verdad, Dylan Jason William Mathew Fox McNally este es mi verdadero yo, espero que no este mas allá de tus expectativas- le dije asintiendo -y que no te arrepientas luego- le aclare sin mas -Expeliarmus- dije con énfasis en la palabra y mi varita aun apuntando directamente hacia ella.

por **Emily Greyback** Dom Jul 04, 2010 6:02 pm

Una carcajada macabra resonó por todo el lugar al escuchar sus palabras, pequeño iluso que había caído en mi juego. La sonrisa de superioridad no se borraba de mi rostro aunque intentara parecer serena una expresión de locura máxima se reflejaba en mi mirada, en cada gesto que proyectaba mi rostro había rastros de demencia y superioridad. Se suponía que Jason era el único con personalidades diversas, aunque cada vez que me encontraba en situaciones como estas me cuestionaba si dentro de mí había un ‘yo’ más maligno del que demuestro cotidianamente y siempre llegaba a la misma conclusión, una persona sedienta de sangre, totalmente sádica con deseos de maldad y sufrimiento, vive dentro mi. Definitivamente, Fenrir tenía la culpa de ello, de forma implícita debía habérmelo inculcado ¿no? De todas formas soy su sobria y algo de maldad debía aprender de él.

Nuestras miradas se retaban por si solas, no eran necesarias más palabras para comprender lo que nos proponíamos, aunque a diferencia de él, mi rostro sonreía dichoso como si fuese una común muggle en un parque de diversiones o una pequeña niña en una juguetería. Como fuese lo estaba disfrutando y lo disfrutaría aun más cuando aquellas palabras que rabiosas intentaban salir de mi mente, estaba fuera de control y eso era evidente. Por momentos olvidaba quien era la persona que tenía al frente y solo dejaba que la crueldad se apoderase de mi cuerpo, aunque al observar a Jason solo podía verlo besándose con otra chica y recordar aquel duro sentimiento que había partido mi corazón en cientos de pedazos, dos años atrás. – Protego- Murmuré esquivan su hechizo tan común, tan simple, tan débil, que no había podido ni hacerme cosquillas ¿A caso no era evidente lo que buscaba? ¿Por qué no se defendía bien si yo lo haría? - ¿Sabes Dylan Mathew Fox McNally? Me agrada tu verdadero yo, más que ese inocente Jason que te empeñas por aparentar… con él eres un débil iluso, con Dylan te comportas de forma más atractiva, por lo menos para mis ojos…- Comenté con atrevimiento mientras daba unos pasos hacia él con coquetería y seducción, la distancia cada vez se hacía más diminuta en donde creía existía un metro y medio entre su cuerpo y el mío. – No pensé que haría uno de mis deseos realidad, es más creía que ya no lo deseaba tanto como antes… pero al verde, fue distinto – Espeté con agresiva seriedad y un evidente rencor en mis palabras. Era conciente que tal vez luego me arrepentiría de ello pero era necesario, era el momento adecuado para hacerlo por distintos motivos, en especial porque no volvería a verlo después de bastante tiempo.

Juntando todo el sentimiento que tenía dentro, toda la rabia, el rencor y el odio que poseía no solo contra él si no que por distintos motivos, empuñe mi varita con fuerza hacía él. Mi brazo tenso se encontraba estirado como fuese una estatua mientras mis labios se separaban sin decir nada, un suave suspiro se escapó de ellos y luego sonreí con perversidad – crucio – Dije elevando mi tono de voz con total seguridad, me arriesgaba a demasiado por conjurar aquella maldición, pero no era nada que papá no puede solucionar. Lo peor de todo se vería cuando mis ojos viesen a Jason retorciéndose en el suelo de dolor, es sabido que ningún hechizo puede evitar el impacto de lo que acababa de conjurar.

por **Jason Fox** Dom Jul 04, 2010 8:03 pm

A pesar de aquel odio que sentía ahora, el hecho de lastimar a Emily no estaba en una de mis opciones, aun que a veces mis ganas superaban aquella racionalidad.
En cuanto hizo aquello simplemente me encogí de hombros, pues lo suponía, no era un hechizo potente, era solo un hechizo de desarme. Al oír lo que decía sonreí con algo de maldad -pues allí comienzas a contradecirte, te parece atractivo el mismo que te engaño- dije con prepotencia y firmeza en mis palabras, eso iba mas allá que una simple provocación y mas aun tratándose de Emily -pero siempre te agrado eso, la maldad en su estado mas puro- le dije con mi mirada clavada en sus ojos, ahora aguardaba algo mas que un simple hechizo, pues las cosas se habían puesto mas que feas. Al escuchar lo siguiente reafirme aquello que había pensado antes, ahora más que nunca esperaría un buen ataque. Ambos parecíamos enojados con el otro y lo estábamos, pues había más de una razón para ello. Me pare de frente mirándolo justo a los ojos aun con mi varita en alto, aun que al oír aquel hechizo mi mirada bajo directo hacia mi pecho sabiendo que no quedaba nada por hacer, el hechizo me golpeo por completo y un agudo dolor comenzó a recorrer mi cuerpo, era una tortura que sufría y aun que podría haber puesto el grito en el cielo guarde mis palabras, aquel dolor me hizo caer de rodillas al suelo y mi vista se levanto buscando la mirada de Emily hasta que la encontré. En mis ojos se reflejaba aquel dolor, pero apretaba mis labios evitando emitir sonido alguno, no sabia que me dolía mas si sus palabras o aquella tortura que azotaba mi cuerpo.

por **Emily Greyback** Mar Jul 06, 2010 6:30 pm

Aquellas palabras resonaron en mi cabeza como un fuerte golpe brusco y descontrolado, cada vez me hacía estar más segura de lo que iba a hacer. Pronuncié fuerte y claro, haciendo que la maldición resonara fuertemente por todo el lugar generando un eco que me resultó escalofriante. Lo vi caerse de rodillas delante de mí, sin emitir dolor alguno, podía notar cómo se tensaban sus músculos como reacción al intenso dolor que debía estar sintiendo. Mi brazo se mantuvo firme hacia él, enviando aquel rayo de luz roja que golpeaba su cuerpo sin que mi conciencia se hiciese presente en la acción que estaba generando. Sentía que lentamente mi cabeza iba volviendo a la situación y toda aquella maldad que tenía dentro se iba haciendo a un lado, no era que me arrepintiese de lo que estaba haciendo pero un nudo se generó en mi pecho cuando su mirada se conectó con la mía. Era capaz de recibir todo el dolor que sentía tanto física como internamente, aunque no podía dudar.

Estaba en el bando oscuro, era una más de las seguidoras de él y sus ideales, aquellos que eran compartidos con mis otros tantos compañeros de Slytherin. Y aunque éramos aun aprendices, no podía sentir lastima por ver a un ser retorciéndose en suelo por más que fuese alguien conocido por mí. El problema era que él era más que eso, él había sido el dueño de mi corazón y como un chico travieso lo había roto en cientos de pedacitos. Fruncí los labios hacia un costado mientras lentamente deshacía la maldición, haciendo que mi varita apuntase el suelo. – Eso no fue ni lo mínimo que sentí yo, cuando me alejé de ti - Di un paso hacia delante mirándolo directo a los ojos con severidad- Aunque esto fue solo un juego Jass, creo que me conoces bien – Comenté cruzando mis brazos delante de mi pecho con segura arrogancia. No era posible que Jason se recuperase tan pronto y lanzara un contra ataque. Di un suave suspiro sin quitar mi atención de él, quería escuchar alguna respuesta algo.

por **Jason Fox** Mar Jul 06, 2010 6:50 pm

Ese agudo dolor que aumentaba a paso lento, como una suave tortura haciendo que me retorciera de dolor, aun que mantenía mis labios con presión, no iba a gritar aun que eso era lo que quería hacer, dejarlo escapar todo en una fuerte descarga, pero no lo haría. Mantenía mi mirada en Emily, como si buscara algo, como si lo huyera encontrado. En cuanto bajo su varita pude sentir que el dolor cesaba lentamente a paso tranquilo y mis oídos escuchaban sus palabras -se que no te di otra elección, pero tampoco te pedí que te fueras- le aclare -era mas fácil huir que enfrentar un problema?- le pregunte, pues solía sucederme, cada vez que tenia un problema solo me iba y allí quedaba todo, pero quizás enfrentarlo era mas fácil pues no tendría que pensarlo tantas veces luego quedaría en nada. Luego de aquellas palabras mías comprendí lo que mi hermana me había querido decir y cerré mis ojos, también había huido a mis problemas y en parte era culpable de aquello también -por cierto, si crees que eso dolió aun mas que estos dos años en una mentira y lo que me dijiste. Tu eres la que no me conoce- le aclare, pues a pesar de ser lo que era también tenia sentimientos y aun que ella los ocultara sabia que también los tenia -tanto como para saber lo que sucede o al menos entenderlo- le dije mientras volvía a abrir mis ojos y la miraba -te sientes mejor ahora?- cuestione algo cínico, irónico y a la vez sin importarme la respuesta. No creía que podía lograr algo al atacarme de aquella forma pero así era ella. No tenia fuerzas como para continuar, estaba algo débil, intente ponerme de pie pero fue en vano, solo logre sentarme y dejarme caer hacia atrás reposando sobre una de las tumbas, aun que aun así sentado seguía mirando a Emily.

Aquel odio que tenia aun estaba allí, pero había logrado tomar conciencia de todo y controle mis propios actos, aun que esa sensación no se iba, era al peor sensación de todas. Una mezcla de sentimientos extrañas que no hacia más que confundirme, el amor que le tenía y el odio que estaba logrando sacar de mí.

por **Emily Greyback** Sáb Jul 10, 2010 6:06 am

Sus palabras generaron un corto circuito dentro de mi ser, cerré y abrí los ojos de golpe al escucharlo hablar. Si seguía con eso se ganaría otro hechizo, tal vez uno mucho peor. – Tenía trece años! – Exclamé alzando la voz, las cosas hubiesen sido demasiado diferentes si aquello hubiese sucedido a esta edad. En el pasado, exactamente hace dos años atrás, no tenía las cosas demasiado claras ni una personalidad definida, ahora todo era diferente. – No sabía cómo actuar Jason, no sabía qué hacer. Huí porque era demasiado para mí – Le confesé sin dejar de observarlo, mi mirada se intensificaba a medida que avanzaba el tiempo, las palabras y los sentimientos de recuerdos que parecían olvidados. Comenzaba a creer que aquel encuentro solo traería negativas consecuencias para mi vida en general, aunque era absurdo caer de nuevo en el mismo abismo. Lizzie Emily Greyback ya no era una chica inocente, si no que todo lo contrario, poseía una postura firme y una estilo de vida delimitado por inmóviles márgenes, imposibles de eliminar.

Avancé hasta él, deteniéndome cuando mis pies chocaron con los suyos. Ignoré todas sus absurdas palabras que estaban totalmente de más, sobraban para mí y la idea que se abalanzó sobre mi mente impidiéndome pensar con libertad. Incliné mi cuerpo hacia delante mientras que mis manos tomaron su rostro con brusquedad, lo fulminaba con la mirada mientras lo levantaba un poco para cercarlo a mí. Mi rostro no demostraba demasiada cordura, si no que todo lo contrario mezclado con maldad y odio, sin embargo lo que sucedió a continuación me asombro tanto a mí como a él.

Acerqué mi rostro al suyo desafiándolo con la mirada mientras eliminaba toda distancia que existiese entre su rostro y el mío, no sabía que iba a pensar de ello ni me importaría, por lo que sellé aquel momento depositando mi labios suavemente sobre los suyos. Si lo pensaba demasiado le lanzaría nuevamente un crucio y de pasada me lanzaría uno a mi por lo que estaba haciendo. Por eso y cientos de razones más, puse la mente en blanco, era un beso lleno de veneno y presunción. Había dejado en claro que mandaba en Hogwarts y no pensaba pasarme a llevar por nada, menos por sentimientos absurdos. Por otro lado, sabía a la perfección lo que debía estar sintiendo mi ex novio en aquellos momentos, aparte de una evidente confusión, un amor y odio extremo, aquel que yo misma me había dedicado de formar. Alejé mi rostro lentamente y solté su rostro dejando que volviese a su posición original – Ahora me siento mejor – Respondí mientras me erguía cruzando mis brazos delante de mi pecho, una sonrisa ladeada se dibujó en mi rostro, estaba complacida de lo que había sucedió aunque solo era un juego, un inocente y angelical juego.

por **Jason Fox** Sáb Jul 10, 2010 6:26 pm

Escuche su respuesta y suspire, era cierto, éramos jóvenes ambos. Pero la edad no era una excusa cuando se amaba en verdad, pero preferí guardar mi opinión, pues sabia que algo como eso solo lograría hacer enfadar a Emily más de la cuenta.
Al oír lo siguiente asentí -bien, entiendo eso- dije asintiendo, quizás si hubiera sido yo el que pasara por eso actuaría igual que ella y esa idea fue la que me hizo guardar silencio y no contestar nada mas al respecto.
Pronto la vi acercarse y mire hacia abajo cuando nuestros pies se chocaron, luego alce mi vista encontrándome directamente con sus ojos y aquella mirada que no podía evitar, sus ojos tenían algo que no me dejaban pensar, solo se me cruzaban ideas y las mismas que antes. Aun que recordando lo que paso eso no podría ser bueno, sabía lo que era un impulso pero cuando Emily hizo aquello y tomo mi rostro me sorprendí demasiado. Si cuando yo lo hice estaba mal porque ella lo repetía ahora, preguntas y mas preguntas me invadieron. Su rostro me confundía aun mas, pues más que querer hacerlo parecía querer matarme, pero los sentimientos siempre jugaban una mala pasada y cuando pensábamos que todos estaban bajo control las cosas se volvían aun más incontrolables.
Valla sorpresa me estaba llevando, aun que no sabia si había algo de realidad en ello no me importo demasiado. La tenia tan cerca que podía sentir su respiración, pero tomaba aquello como una provocación de su parte y me resistí a volver a hacer lo que había hecho antes, pero en cuanto rompió esa distancia, besándome, me olvide de todo y solo me dedique a hacer lo mismo, devolverle aquel suave beso, lleno de sentimientos que se peleaban por aparecer pero ninguno lo lograba, aun que estaba claro que aquel beso no llevaba muchas cosas buenas con sigo. Mis sentimientos se mezclaban haciendo que la odie por haber hecho aquello luego de lo que había pasado pero también quería hacerlo y eso me hacia hasta odiarme a mi mismo, a veces era tan incomprensible lo que abarcaba el amor. Mis manos fueron a parar directamente hacia su cintura y en cuanto se alejo la solté. Al oír lo que dijo alce una ceja, ¿mejor porque? por confundirme, por intentar algo y yo no saber que, porque era mejor así -y eso porque?- solo pude decir.

por **Emily Greyback** Mar Jul 13, 2010 4:56 am

Di un suave suspiro al distinguir la expresión de su rostro, lo observé serena, aquello había sido bastante extraño incluso para mí. Alcé una ceja solo por imitarlo y lo escuché preguntar, cosa que pronunció aun más el mohín que mi rostro demostraba. Interesante pregunta querido Wartson, pensé mientras colocaba un mano bajo mi mentón y sin decir nada me senté a su lado. Clavé mi mirada en el cielo, la noche estaba bastante hermosa como para desperdiciar aquello.- Porque tú me lo has preguntado y yo me he limitado a responder – Comenté encogiéndome de hombros, no era una respuesta clara pero todo a mi lado era bastante abstracto, difuso y poseía más de una interpretación, no podía hacer nada al respecto. Ser impredecible era una virtud para mi, aunque un defecto muchas veces para todos los demás.

Ladee un poco la cabeza para observar una constelación que estaba sobre nosotros, alcé la vista lo más que pude y perdí mi interés en ellas. ¿Quién diría que yo la próxima vez que observarse las constelaciones en su mayor esplendor, caería a sus pies? Un suave suspiro se escapó de mis labios mientras los parpados caían sobre mis ojos impidiendo mi visión, una fresca brisa nos golpeó de fuerte logrando que el momento fuese aun más grato, que casi había olvidado a la persona que se encontraba a mi lado. Me sentí observada por lo que abrí los ojos lentamente, para mi sorpresa el rostro de Jason seguía donde estaba desde hace unos minutos. – A pesar de todo te tengo un poco de cariños ¿sabes? – Le comenté, no era que lo amase y todo eso pero había sido mi primer novio, y el único, también debía poseer la mínima parte de mi cariño. De aquel cariño tan minúsculo que quedaba en mi frío corazón. No sentía ni una mínima pizca de culpa por el crucio que había lanzado y me pregunté si aquello sería igual para todos los que lanzaban maldiciones imperdonables o solo para algunos como yo…

por **Jason Fox** Mar Jul 20, 2010 6:17 pm

La seguí con la mirada y en cuanto se sentó a mi lado alce una ceja, al oír su respuesta me confundió aun mas -entonces, te sientes mejor lanzándome un Cruccio y luego besándome?- cuestione algo asombrado -bonita forma de sentirse mejor- dije intentando ocultar una sonrisa y algo de diversión, es verdad que eso me asombraba un poco, pero era común enterarme algo nuevo o tener una sorpresa al tratarse de Emily. Luego la mire continuamente, como si intentara saber algo, su mirada se perdió entre el cielo, aun que yo no dejaba de mirarla a ella. Al oír su pregunta ladee mi cabeza y sonreí dificultosamente -si así demuestras tu cariño, la primera parte deberías ocúltamela- dije sin poder evitar soltar ese costado bromista que tenia -pues tu cariño hace sufrir y demasiado- agregue aun con aquella gracia, pero luego solo lleve mis rodillas a mi pecho y las abrace con ambos brazos, para luego dar un suspiro y mirar al frente manteniéndome callado, como si en verdad pensara algo o buscara descifrar algo, con ese toque misterioso y común en mi. Aun que quizás aquello era por el simple hecho de que prefería guardar silencio antes de meterme en problemas de nuevo, o mejor dicho de hacer que ella se enfade conmigo. Solo creía que era mejor un largo silencio y contemplarla que arruinarlo todo diciendo algo, aun que tenia mucho para decir.

por **Emily Greyback** Miér Ago 11, 2010 1:49 am

Me mordí el labio inferior escuchando sus palabras, sonreía alternadamente con gestos extraños que a primera vista no supe como interpretar. Caía en la cuenta de que lo que había sucedido anteriormente había sido bastante extraño incluso para mí limite de extrañeza que creí no conocer. De cierta manera tenía razón, era bastante inmadura la forma en que me había comportado, si tan solo hubiese optado por quedarme en un solo extremo de la cuerda en vez de jugar al odio y al amo. Estaba cerca, muy cerca, cosa que pude apoyar mi cabeza en su hombro con facilidad, lo hice y me quedé así con los ojos cerrados mientras me concentraba en escuchar la finalización de lo que quería expresarme. Se le terminaron las palabras y yo seguí ahí donde me encontraba, no se me movió ni un músculo. Todo podría haber sido distinto pero yo misma había optado por ese suceso, ese reencuentro, esa sensación que aunque no era culpa, me había dejado algo incómoda. Si, ‘algo’ porque tampoco era que me moría de arrepentimiento porque lo amaba intensamente, no. Pero el primer novio no era fácil de olvidar por todo aquello que significaba, no se podría decir que fue mi primer amor porque no lo era, si lo hubiese amado de verdad no hubiese huido como una pequeña inmadura, hubiese luchado por su amor y eso no fue exactamente lo que sucedió.

El tiempo comenzó a pasar de forma lenta y fría abrazados a ese extraño silencio que ninguno era capaz de romper. Me mordí el labio inferior para luego deshacer aquella sensación que nos abrazaba, alcé la cabeza y deposité mis labios fríos en su mejilla, la besé con delicadeza y de la misma manera me puse de pie dejando atrás todo el pasad. Era el momento de partir. – Debo irme, mañana será un nuevo día…- Comenté girándome para observarlo por ultima vez. Otorgándole una sonrisa volví a mirar hacia el castillo dándole la espalda, sentí como mis cabellos comenzaron a balancearse en el aire. – una nueva vida…- Agregué de forma suave y casi inaudible, no quería que oyera aquello como quería que lo hiciera. Confusión, era el primer signo de que algo andaba mal. ¿Cómo no lo ha de estar si mañana mi vida daría un giro inesperado? Me mordí la lengua para no decir algo más, podría traicionarme a mi misma por la neblina mental que poseía en aquellos momentos.

por **Jason Fox** Miér Ago 11, 2010 9:27 pm

Al parecer había evadido mi pregunta y aun que me la seguía cuestionando a mi mismo no volví a repetir la pregunta nuevamente, conocía a Emily y también conocía sus misterios, aun que siempre me sorprendía con algo nuevo y distinto, era una laberinto sin final, siempre conseguía perderte.
Apenas suspire ligeramente y su cabeza se apoyo sobre mi hombro, sonreí ligeramente pero aun así guarde silencio. Quizás no había sido el mejor reencuentro, pero estaba seguro de que eso no lo olvidaría. Ambos conocíamos a la perfección la historia, los defectos, los errores y hasta las perfecciones del otro y ambos sabíamos perfectamente que a ninguno de los dos esta historia nos cerraba por completo, aun que no quería que esa historia fuera cerrada, solo quería aclarar las cosas, no me arriesgaría a perder a Emily pero tampoco la obligaría a nada.
Recibí su beso en la mejilla y me voltee a verla, mire fijamente sus ojos, por alguna razón no podía evitarlo, sus ojos eran parte de mi debilidad por ella. Le sonreí ligeramente y suspire rápidamente -lo se... solo recuerda que puedes contar con migo y no me importa lo que pase- le aclare devolviéndole la sonrisa y antes de que se alejara mas le dije -deberías sonreír mas seguido, te ves bien así- alcance a decirle y me quede allí sentado viendo como desaparecía en la oscuridad del lugar, me quede algunos minutos mas allí, pensando algunas cosas en la tranquilidad del lugar y pronto me puse de pie y me dirigí de nuevo al castillo.

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